jueves, 5 de mayo de 2016

SU FELICIDAD ES MI FELICIDAD

No puedo pedir más. Tengo lo que siempre he querido. Alguien que de  verdad me ama, que se preocupa por mi, que me cuida. Nellie es fantástica. La amo. No puede ser de otra manera. Cada vez me siento más feliz y orgullosa de haber tomado la decisión de irme con ella. Porque ella merece que estemos juntas y también todo el amor que yo le pueda dar.
Nunca antes me he sentido tan bien como ahora en RLC. Y ni siquiera necesito hacer mucho, sólo estar con ella, eso me basta, porque cualquier cosa que hagamos se convierte en algo maravilloso si lo hacemos juntas. Ella dice que todo su mundo gira a mi alrededor, y el mio alrededor de ella, me emociono al pensar cuanto la amo, cuanto me ama. Su felicidad es mi felicidad, y nada ni nadie podrá cambiar lo que siento por ella.
Ayer además, me convertí oficialmente en miembro de la familia RLH. Sé que a ella le hacía ilusión que lo fuera, aunque siempre me ha dicho que era decisión solo mia si queria serlo o no. Llevaba un tiempo pensandolo, y ayer después de que el día antes, Nellie le contara una fantasía que yo tenía a Miss Chela, y le pidiera si podriamos hacerla con ella alguna vez, Miss Chela me preguntó si queria ser miembro de la familia. Le dije que sí y desde ayer lo soy oficialmente. Me siento bien, feliz, sobre todo porque Nellie esta conmigo en este nuevo camino. Porque la tengo a mi lado, conmigo. Ella dice que es un sueño, sí, un sueño maravilloso que cada día se vuelve aún más maravilloso y que espero que dure para siempre.
¡Ah! Blaze, el es otro tema. He sabido que esa fantastica familia que tenía, ese Milagro (como se llamaba la chica con la que estaba ultimamente) la que me echó en cara que le iba tan bien y mejor que conmigo hace unos dias. Pues ha roto con ella, parece ser. No sé exactamente porque, tampoco me interesa. Me sabe mal por él, pero él siempre ha tenido muy mal ojo con la gente y confia demasiado pronto en quien quizás no debería confiar, pero bueno. Es su problema, todo viene de ese afán que tiene por vivir sus fantasías. Lo siento mucho por él, y de verdad deseo que le vaya bien. En fin, por lo menos yo si puedo decir que soy feliz.

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